La remolacha es uno de esos alimentos que sorprenden. Con su color rojo vibrante, su gusto ligeramente dulce y su perfil nutricional poderoso, esta raíz pasó de ser “la olvidada” del cajón de verduras a convertirse en un superalimento natural. Y lo mejor: sus efectos positivos pueden sentirse apenas unas horas después de consumirla.
Si alguna vez te preguntaste qué sucede exactamente en tu cuerpo cuando la comés, por qué cada vez más personas la incluyen en su dieta o cómo podés prepararla de manera sencilla, acá te lo contamos.
Qué ocurre en tu cuerpo 3 horas después de comer remolacha
En tan solo tres horas después de incorporarla a tu comida, la remolacha puede producir varios cambios notables:
1. Aumento de energía y mejor desempeño físico
La remolacha es famosa por su alto contenido en nitratos naturales. Una vez dentro del cuerpo, estos se convierten en óxido nítrico, un compuesto que dilata los vasos sanguíneos, mejora la circulación y aumenta el aporte de oxígeno a los músculos.
¿El resultado? Más energía, mayor resistencia y un rendimiento físico más eficiente. Por eso es tan popular entre quienes entrenan.
2. Digestión más activa y saludable
Este vegetal aporta una buena cantidad de fibra, ideal para mejorar el tránsito intestinal y mantener una digestión equilibrada. Además, contiene betaina, una sustancia que protege y apoya el funcionamiento del hígado.
3. Beneficios para el corazón
Los mismos nitratos que aumentan la energía también contribuyen a reducir la presión arterial de manera natural, ayudando a cuidar la salud cardiovascular y disminuyendo el riesgo de enfermedades cardíacas.
4. Piel más luminosa y limpia
Las betalainas, los pigmentos antioxidantes responsables de su color rojizo, ayudan a combatir los radicales libres. Esto puede traducirse en una piel más radiante, con mejor textura y apariencia.
5. Un cambio de color curioso (y normal)
Es muy común que, luego de comer remolacha, la orina o las heces adquieran un tono rojizo. Este fenómeno se llama beturia, es completamente inocuo y desaparece solo.
Receta fácil: Remolachas al horno (deliciosas y versátiles)
Ingredientes
- 4 remolachas medianas
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cucharadita de sal marina
- ½ cucharadita de pimienta negra
- 2 ramitas de tomillo fresco (opcional)
Preparación
- Precalentá el horno a 200°C.
- Lavá y pelá las remolachas (si querés, usá guantes para evitar manchas).
- Cortalas en cubos o gajos.
- Mezclalas en un bowl con el aceite, la sal y la pimienta.
- Colocalas en una bandeja con papel manteca.
- Horneá 30–40 minutos, dándolas vuelta a la mitad.
- Si usás tomillo, agregalo en los últimos 10 minutos.
- Servilas calientes o frías para ensaladas.
Cómo servirlas y cómo conservarlas
Formas ricas de servir
- En ensaladas con rúcula, queso de cabra y vinagreta.
- Como guarnición para carnes, pollo o pescado.
- En bowls con arroz integral, quinoa o legumbres.
Para conservar correctamente
- Guardalas en un recipiente hermético hasta 4 días en la heladera.
- También podés freezarlas ya cocidas: cortalas, dejalas enfriar y almacenalas por hasta 6 meses.
Otras maneras de sumar remolacha a tus comidas
- Ensalada completa: combiná remolacha cocida con queso feta, nueces y aceto balsámico.
- Jugo natural: procesala con manzana, zanahoria y jengibre.
- Sopa cremosa: hervila con cebolla, ajo y caldo, y procesá hasta obtener una textura suave.
- Chips crocantes: cortá en láminas finas y horneá a 180°C 20–25 minutos.
Preguntas frecuentes
¿Por qué me siento con más energía al comer remolacha?
Por sus nitratos naturales, que mejoran la circulación y optimizan el suministro de oxígeno a los músculos.
¿Ayuda a la digestión?
Sí, su fibra favorece el tránsito intestinal y sus compuestos protegen el hígado.
¿Es normal que la orina cambie de color?
Totalmente. La tonalidad rojiza es común y temporal.
¿Tiene contraindicaciones?
Es segura para la mayoría, pero si tenés presión baja o antecedentes de cálculos renales, consultá antes a tu médico.
¿Sirve para mejorar el rendimiento físico?
Sí, sus nitratos mejoran la resistencia y la capacidad aeróbica.
Conclusión: un alimento sencillo con efectos sorprendentes
Sumar remolacha a tu dieta es una decisión simple que trae grandes beneficios. En pocas horas podés sentir más energía, una digestión más fluida, una piel más saludable y un corazón mejor protegido.
Podés disfrutarla asada, en jugos, ensaladas o incluso en chips caseros. Ágil, versátil y nutritiva… esta raíz