Si buscas una receta fresca, sabrosa y con carácter mediterráneo, estos buñuelos de calabacín, feta y espinacas son justo lo que necesitas. Crujientes por fuera, suaves y jugosos por dentro, y acompañados de un tzatziki de ajo cremoso y refrescante, son perfectos como aperitivo, plato principal ligero o estrella de una mesa para compartir.
Un poco de historia deliciosa
Estos buñuelos tienen su origen en la tradición culinaria griega, donde se conocen como kolokithokeftedes. Su nombre puede ser un reto para la lengua, pero su sabor conquista desde el primer bocado. Tradicionalmente se sirven como parte del meze, una selección de pequeños platos pensados para compartir, conversar y disfrutar sin prisas.
La combinación de calabacín rallado, queso feta salado y espinacas frescas es un clásico del Mediterráneo: ingredientes simples que juntos crean magia. Y, por supuesto, no pueden presentarse solos… el tzatziki entra en escena para elevarlo todo con su frescura, ajo y limón.
Dicen las leyendas culinarias que incluso los filósofos de la antigua Grecia debatían sobre la vida y la virtud mientras saboreaban algo muy parecido a estos buñuelos. Así que prepárate: estás a punto de comer como un auténtico dios del Olimpo.
Ingredientes (4 porciones generosas)
Para los buñuelos
- 2 calabacines medianos (aprox. 400 g)
- 100 g de espinacas frescas (o congeladas, bien escurridas)
- 150 g de queso feta desmoronado
- 1 huevo grande
- 3 cucharadas de harina de trigo (o harina de garbanzo)
- 1 cucharadita de comino en polvo
- 1 pizca de nuez moscada
- Sal y pimienta al gusto
- Aceite de oliva para freír
Para el tzatziki de ajo
- 200 g de yogur griego natural sin azúcar
- 1 pepino pequeño rallado y bien escurrido
- 1 diente de ajo finamente picado (ajusta al gusto)
- 1 cucharada de jugo de limón
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 1 cucharada de eneldo (opcional)
- Sal y pimienta al gusto
Paso a paso: manos a la obra
1️⃣ Preparar el calabacín
- Lava y ralla los calabacines con piel.
- Colócalos en un colador, añade una pizca de sal y deja reposar 10 minutos.
- Exprime muy bien el líquido sobrante con un paño limpio o con las manos (sin piedad).
2️⃣ La mezcla perfecta
- Si usas espinacas frescas, pícalas finamente y saltéalas un minuto hasta que reduzcan volumen.
- En un bol grande mezcla el calabacín escurrido, las espinacas, el feta y el huevo.
- Añade la harina, el comino, la nuez moscada, sal y pimienta.
- Mezcla hasta obtener una masa húmeda pero manejable. Si está muy líquida, añade un poco más de harina.
3️⃣ El momento crujiente
- Calienta una sartén amplia con aceite de oliva a fuego medio-alto.
- Forma pequeñas tortitas con una cuchara o con las manos.
- Fríe 3–4 minutos por lado, hasta que estén doradas y crujientes.
- Retira y colócalas sobre papel absorbente.
4️⃣ Tzatziki de ajo
- Mezcla el yogur, el pepino, el ajo, el limón, el aceite, el eneldo, sal y pimienta.
- Revuelve bien y deja reposar en el refrigerador entre 15 y 30 minutos para potenciar el sabor.
Cómo servirlos
Sirve los buñuelos bien calientes junto al tzatziki frío. Acompáñalos con pan pita, una ensalada fresca o incluso una copa de vino blanco. Cierra los ojos… y estarás cenando en una taberna griega frente al mar.
Una historia divertida: El calabacín rebelde
Se dice que una vez un calabacín soñó con ser estrella de televisión y huyó de la cocina para protagonizar una telenovela llamada “Amor y Fritura”. Al final descubrió que su verdadero destino no era la pantalla… sino la sartén. Brilló como nunca, crujiente y dorado, y vivió feliz convertido en buñuelo.
Valor nutricional aproximado (por porción)
- Calorías: 310 kcal
- Proteínas: 11 g
- Grasas totales: 20 g
- Grasas saturadas: 7 g
- Carbohidratos: 22 g
- Fibra: 4 g
- Azúcares: 4 g
- Sodio: 560 mg
- Calcio: 250 mg
- Hierro: 2 mg
Consejos finales
✅ Añade ½ cucharadita de polvo de hornear para buñuelos más esponjosos.
✅ Puedes hornearlos a 180 °C durante 20–25 minutos si prefieres una versión más ligera.
✅ Prueba con hierbas frescas como menta o perejil para variar el sabor.
Conclusión
Estos buñuelos de calabacín, feta y espinacas con tzatziki de ajo son una auténtica celebración mediterránea: sencillos, sabrosos y perfectos para compartir. Ideales para una comida ligera, un aperitivo especial o simplemente para darte un capricho delicioso.